¿ Puede un cristiano caer de la gracia?

La Biblia es un conjunto. Tiene armonía aún que se escribió en un espacio de mil quinientos años por cerca de cuarenta autores , de edades, nivel sociocultural y ciudades diferentes. El espíritu Santo fue el que inspiró a los santos escritores y solo con su ayuda podemos comprender las sagradas Escrituras.

No puedo llegar con una idea preconcebida y buscar el apoyo de las escrituras. Hasta puedo encontrar algún versículo que me apoye aparentemente, pero tendré toda una Biblia que me contradice. Esto se pasa con la “perseverancia de los santos” calvinista, que como toda TULIP, no se sostiene cuando comparada con el contexto de toda la Biblia.Un tema que es blanco de controversia es el de "caer de la gracia", lo que trataremos de analizar en lo que sigue.

1. Me gustaría dar algunas definiciones de la palabra caer.

caer.

(Del lat. cadĕre).

1. intr. Dicho de un cuerpo: Moverse de arriba abajo por la acción de su propio peso. U. t. c. prnl.

2. intr. Colgar, pender, inclinarse. U. t. c. prnl. El pelo le cae sobre la frente.

3. intr. Dicho de un cuerpo: Perder el equilibrio hasta dar en tierra o cosa firme que lo detenga. U. t. c. prnl.

4. intr. Dicho de una cosa: Descender de un nivel o valor a otro menor. Un electrón cae de una órbita a otra de menor energía. (Real academia).

El sentido natural es muy similar al espiritual: “Moverse de arriba abajo por la acción del propio peso”;cuando el egoísmo y el pecado en general lo hacen tumbar a uno. “La soberbia precede la caída”. “ Perder el equilibrio hasta dar en tierra o cosa firme que lo detenga”; es la situación cuando uno abandona la palabra de Dios, la oración y anda tambaleando espiritualmente hasta que caiga. Y por último, “descender de un nivel o valor a otro menor” es cuando uno siendo un hijo de Dios, por su propia voluntad deja esta posición y busca vivir según el mundo. Eso es bajar el nivel, como el hijo pródigo. Estas cosas hablan de una caída espiritual, cuando uno a causa del pecado, pierde la comunión con Dios, su posición espiritual, y su nombre es borrado del libro de la vida. El mayor ejemplo en las escrituras es la caída de satanás (Lucas 10:18; Isaías 14:12; Ezequiel 28:17). Haciendo estas comparaciones, ahora vamos seguir mirando lo que dice la Biblia.

2. Caer de la gracia

La única vez que la Palabra de Dios se refiere a caer de la gracia es cuando Pablo escribiendo a los Gálatas, los reprendió por haberen aceptado la enseñanza de los judaizantes, que decían que uno para ser salvo no basta creer y confesar a Cristo como Señor: Tenían que circuncidar y guardar la ley de Moisés. A eso Pablo se refería. “De Cristo os desligasteis, los que por la Ley os justificáis; de la gracia habéis caído.” (Gálatas 5:4). No tiene directamente que ver con el párrafo anterior. Pero actualmente los calvinistas están haciendo con que algunos caigan de la gracia, enseñando la doctrina adventista de que el cristiano debe guardar la “ley moral”.

3. Creyentes que cayeron en el Antiguo Testamento

a. Sansón

Este siervo de Dios era un nazareo. Tenía un voto de no cortar el cabello y no beber bebida fuerte ni vino. Tenía una fuerza sobrenatural y juzgaba a Israel. Su caída comenzó por el desliz moral, por juntarse con mujeres impías y contar su secreto. Terminó perdiendo las fuerzas y visión, siendo objeto de burlas y suicidóse al vengar de sus enemigos filisteos.

b. David

Dice la Biblia que David era un hombre según el corazón de Dios. Este mismo hombre es aquél que estando ocioso, codició Batsabé, mujer de Urías heteo, adulteró con ella y mando su marido para morir en la batalla. Fué una gran caída, pero al ser confrontado por el profeta Natan, reconoció su error, humillándose, y el Señor lo perdonó. El Salmo 51 registra su quebrantamiento. Se levantó y vino ser el predecesor del Mesías.

c. Salomón

Este rey tuvo paz en sus días. Dios le apareció y concedió la sabiduría que pidió. Construyó el templo de Israel, escribió algunos Salmos, provérbios, Eclesiastés y Cantares. Su sabiduría quedó conocida en los rincones más lejanos del mundo conocido. Pero para agradar a sus muchas esposas extranjeras, construyó templos y altares a quemós, astarte, milcon y otros falsos dioses de las naciones vecinas. Esta fue su caída. La Biblia no registra que se haya levantado y por causa de su pecado, Israel fue dividido en dos en la época de su hijo. (1 Reyes 4: 29-34).

1 Pero el rey Salomón amó, además de la hija del faraón, a muchas mujeres extranjeras, de Moab, de Amón, de Edom, de Sidón, y heteas;

2 gentes de las cuales Jehová había dicho a los hijos de Israel: «No os uniréis a ellas, ni ellas se unirán a vosotros, porque ciertamente harán que vuestros corazones se inclinen tras sus dioses». A estas, pues, se juntó Salomón por amor.

3 Y tuvo setecientas mujeres reinas y trescientas concubinas, y sus mujeres le desviaron el corazón.

4 Cuando Salomón era ya viejo, sus mujeres le inclinaron el corazón tras dioses ajenos, y su corazón no era ya perfecto para con Jehová, su Dios, como el corazón de su padre David.

5 Salomón siguió a Astoret, diosa de los sidonios, y a Milcom, ídolo abominable de los amonitas.

6 E hizo Salomón lo malo ante los ojos de Jehová, pues no siguió cumplidamente a Jehová como su padre David.

7 Entonces edificó Salomón un lugar alto a Quemos, ídolo abominable de Moab, en el monte que está enfrente de Jerusalén, y a Moloc, ídolo abominable de los hijos de Amón.

8 Lo mismo hizo para todas sus mujeres extranjeras, las cuales quemaban incienso y ofrecían sacrificios a sus dioses.

9 Y se enojó Jehová contra Salomón, por cuanto su corazón se había apartado de Jehová, Dios de Israel, que se le había aparecido dos veces

10 y le había mandado sobre este asunto que no siguiera a dioses ajenos. Pero él no guardó lo que le mandó Jehová.

11 Entonces Jehová dijo a Salomón: «Por cuanto has obrado así, y no has guardado mi pacto y los estatutos que yo te mandé, te quitaré el reino y lo entregaré a tu siervo.

12 Sin embargo, no lo haré en tus días, por amor a David, tu padre; lo quitaré de manos de tu hijo. (1 Reyes 11:1-12).

26 ¿No pecó por esto Salomón, rey de Israel? Aunque en muchas naciones no hubo rey como él, que era amado de su Dios y Dios lo había puesto por rey sobre todo Israel, aun a él lo hicieron pecar las mujeres extranjeras. (Neemías 13:26).

La caída de este último fue explicitamente la idolatría. Pecado grave delante del Dios Todopoderoso. La Biblia no omitió la caída de sus personajes, sino fue transparente para nuestro ejemplo, para que no cayéramos en los mismos errores. (1 Coríntios 10:11).

4. Según los escritos de Pablo, un creyente puede caer.

“6 que no sea un neófito, no sea que envaneciéndose caiga en la condenación del diablo.” (1 Timoteo 3:6).

9 pero los que quieren enriquecerse caen en tentación y lazo, y en muchas codicias necias y dañosas que hunden a los hombres en destrucción y perdición,

10 porque raíz de todos los males es el amor al dinero, el cual codiciando algunos, se extraviaron de la fe y fueron atormentados con muchos dolores. (1 Timoteo 6:6-9).

29 El que come y bebe indignamente, sin discernir el cuerpo del Señor, juicio come y bebe para sí.

30 Por lo cual hay muchos enfermos y debilitados entre vosotros, y muchos han muerto. (1 Corintios 11:29,30).

12 Así que el que piensa estar firme, mire que no caiga. (1 Coríntios 10:12).

En los versículos arriba se puede ver claramente que un anciano puede caer en condenación del diablo, cuando se envanece; que los que quieren ser ricos, caen en tentación y lazo... “hunden a los hombres en destrucción y perdición”. Y también cuando Pablo se refería al que come y bebe indignamente la santa cena, lo hace para juicio. Si no hay condenación para los que están en Cristo Jesús (Romanos 8:1,2), los que están condenados ya no están en Cristo, están perdidos, sin salvación. Esta es la condición de los caídos. Queda la amonestación de Pablo: “ El que piensa estar firme, mire que no caiga.”

5. Jesús enseñó que uno puede caerse

26 Pero a cualquiera que me oye estas palabras y no las practica, lo compararé a un hombre insensato que edificó su casa sobre la arena.

27 Descendió la lluvia, vinieron ríos, soplaron vientos y dieron con ímpetu contra aquella casa; y cayó, y fue grande su ruina». (Mateo 7:26,27).

41 Velad y orad para que no entréis en tentación; el espíritu a la verdad está dispuesto, pero la carne es débil. (Mateo 21:41).

36 Velad, pues, orando en todo tiempo que seáis tenidos por dignos de escapar de todas estas cosas que vendrán, y de estar en pie delante del Hijo del hombre». (Lucas 21:36).

No habría mejor forma de cerrar este artículo que mostrar esas enseñenzas de Jesús! Aqui Él nos enseña que el hombre que oye Su palabra pero no la pone por obra es aquél que edificó su casa sobre la arena. Cuando vengan las tribulaciones de la vida no va soportar, se va caer y va ser grande su ruína. También Jesucristo habla de la necesidad de velar y orar para no entrara en tentación a causa de la debilidad de la carne. También para que uno pueda escapar de los juícios venideros y estar de pie delante del Hijo del Hombre, en Su venida.

Conclusión

Podríamos añadir algunas cosas pero la nuestra idea no es agotar todo el tema con este artículo. Todavía hay mucho que decir, pero esperamos que lo expuesto ayude en la comprensión. Queda claro que la expresión “caer de la gracia” fue mal usada por creyentes de otras épocas (principalmente en el siglo 16) y la única vez que se emplea es en Gálatas, hablando de los que habían recibido la salvación por gracia y la querían mezclar con la ley de Moisés. Pero la Biblia habla de la caída espiritual por medio de las tentaciones o cuando abandona las palabras del Señor. Esa caída apunta a condenación, juício y perdición, como hemos visto en los textos abundantes. Por todo eso nos queda la amonestación: ¿cómo escaparemos nosotros, si descuidamos una salvación tan grande? (Hebreos 2:3a).